Sinceramente desde el otro día quería expresarme sobre este asunto, pero siempre se me pasaba por alto. Bueno, lo que pasa es que me sentaba frente a la computadora con la intención de escribir sobre el tema que tenía en mente, sin embargo, hoy ya no se puede más.
Cada que me siento a escribir, me dan ganas de mear.
Obviamente, antes de escribir el título, fuí a orinar. No es que me moleste en absoluto el natural acto de echar fuera de mi organismo los desperdicios líquidos de mi cuerpo, pero llama bastante la atención que a mi pene no se le ocurre otro momento para expresarse urinariamente que el rato en que abro el editor de texto.
A veces pienso que se trata de alguna maldición que me habrá tirado algún envidioso hijo de puta. Inmediatamente descarto la idea: esas huevadas no existen (apartando el hecho de que toda mi infancia fui guiado y consentido por gitanas curanderas que siempre me ponían sus brujerías más poderosas para protegerme).
Es inexplicable. Me siento un par de horas a navegar por internet y no pasa nada. Pero cuando ya me siento preparado para el espectáculo que es verme elaborar un editorial, justo allí, me dan ganas de orinar. No sé si es que mi vejiga urinaria sabe cuando abro el Dreamweaver, o si el programa emite una señal que activa el sistema urinario, pero lo cierto es que un Niágara de meado se me viene y debo soplar al water.
Desde que me di cuenta de la anomalía, experimenté no bebiendo líquidos, probando otros horarios, nada... así esté con el estómago vacío, me dan ganas de orinar cuando me siento a escribir en ésta página. ¿de donde carajos saca mi cuerpo el líquido para hacer pipí si no he tomado agua?
Bueno, escribí sobre esto porque tenía el tema para un editorial pepa, pero es que ya me cabreó tanta meadera. Pero ya voy a hacer el editorial que de verdad iba a hacer.