Yo siempre sostengo que odiar es una moda, hoy odias, mañana odias otra cosa, y en el lecho de tu muerte, los amas a todos. Ghandi predicó el perdón, lo mataron. Lennon habló por la paz, y fue muerto a balazos. Cada que se aparece alguien a hablarnos de amor, lo callamos a balazos. Los filántropos no son más que millonarios con la conciencia sucia que se escudan en la ideología de dar para ganarse el cielo, como mercenarios de la bondad, porque eso es lo que hacen los que tienen la mente dañada y no saben cómo reparar las cagadas de la vida.
Dios te odia.
Yo declaro que nadie tiene derecho a odiar, por una simple razón: Todos tenemos cosas detestables. Todos tenemos, eso sí, libertad para odiar, pero como ya lo he predicado varias veces a lo largo de mis encamadores textos, justificando las cosas tendremos una posición estable en los argumentos. Si me vienes a hablar huevadas, te odio por antonomasia.
¿Ves mi página? ¿Alguna vez te ha provocado mandarme a la mierda por algo que he escrito aquí? Es lógico, hasta una persona como yo puede ser odiada, no se diga la gente común y corriente. Lo que me manda al carajo es ver la poca sangre en la cara de las personas que protestan por cosas importantes (para ellos) y en la intimidad de sus casas pueden ser tan repugnantes como manosearse la grasa de las bolas para olérselas.
Aquí van los berreados y repetitivos temas de Internet que la gente adora consumir para aumentar la bola de odio, una joroba del alma que les encanta cargar para darle un sentido a su existencia patética y sin oficio en este olvidado planeta de una galaxia cualquiera. Clásicos temas que debes escoger si quieres ser "parte de algo"
LA TELEVISIÓN BASURA:
¿Qué odian?:
Básicamente se odian los programas de farándula, chismes, cuentos, artistas idiotas con un 0 de coeficiente intelectual cuya música o talento raya en lo inverosímil. También se odia, en menor grado, telenovelas con argumentos estúpidos, programas de baile para alcanzar un sueño, realities de mierda, etc.
Lo cierto es que la gran mayoría de gente de mierda se sienta 12 horas al día a quejarse de la mierda que ven. Es decir, soy un chancho que me baño en heces, apesto a deposiciones fecales, y al final de la noche me quejo porque me apesta la boca a caca. Hay internet hoy en día, hace rato que podemos matar esta programación de mierda con dos soluciones:
A) Estudiar para yo mismo hacer programación de calidad.
B) Tirar el televisor cuando pase el camión de la basura y contratar Internet.
C) No ver televisión.
Odian a los presentadores, a los temas, inclusive a los canales (?). Odian las caricatiras de hoy ¿Tienes problemas, tarado? Tienes pelos en las bolsas, no deberías estar criticando caricaturas para niños. Tu época fue de los Looney Toons y los Thundercats, la época murió cuando creciste, supéralo.
EL FÚTBOL:
¿Qué odian?
Todo aquel equipo y derivados que no sea el de uno.
Los hinchas de esos equipos.
Los cronistas deportivos que no hablan bien (o simplemente no hablan) del equipo de uno.
Los equipos que ganan.
Realmente se revuelven los genitales al asomarse en cualquier sitio en Internet y leer a la gente despotricar contra otros por temas de fútbol. Es como si las personas al levantarse pensaran "Bueno, vamos a putear por Internet". Es una vertiente de diarrea estólida el momento en que se realiza un partido, y la gente te insulta hasta desearte la peor desgracia (amenazas incluidas, porque el ecuatoriano es así de meco tapiñado) .
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| ¿Y tú crees que las barras son cultas? |
La payasada se extiende por internet con páginas dedicadas al apoyo de estas instituciones. ¿Páginas para alentar? Como si algo se sacara de leer a esos imbéciles. Estoy seguro que un dirigente deportivo lo que menos hace es leer a sus hinchas, ya que un buen hombre de negocios nada saca de gente que no estudia economía.
Resulta que un equipo ajeno no tiene derecho a jugar bien y a ganar, porque enseguida aflora el odio y los epítetos clasistas o nacionalistas sin fundamento. Todos los hinchas de fútbol deberían hacer una inmensa fila y tragarse uno por uno el semen de mis eyaculaciones.
JUSTIN BIEBER:
¿Qué odian?
No saben exactamente qué es lo que odian, pero parece que es la pinta de nena que tiene, aparte de su música comercial y poco creativa.
Este es un gran ejemplo que expongo cuando argumento que el odio es moda. Ok, a todos nos desagrada Justin Bieber, pero realmente cansa leer todos los días algo que ya se sabe: Que Justin Bieber vale verga. Esa gente realmente ya es detestable, porque están del bando de los anti-Biebers porque se ve mal ser fan de Bieber, pero nada más.
Bieber es una lata para vender, una muñeca inflable atractiva para las mentes débiles de los hermanos menores, total es popular a la fuerza. Sus canciones no tienen creatividad y se basan en la imagen proyectada en público, mas no en un espíritu artístico que salga de su cerebro. Boicotearlo es tan sencillo como dejar de hablar y mencionarlo. El odio a Bieber realmente se volvió otra marca registrada, y eso sucede cuando el odio es "porque sí".
El punto de la idiotez llega cuando se hace la "ejemplar" comparación Kurt Cobain vs. Justin Bieber. Carajo, ¿Qué derecho tiene el rock a sentirse con "enemigos" de su música? Como que Kurt Cobain sea un ejemplo de buena música para mí, ¿Se han detenido a interpretar un poco sus letras también? Al menos el Bieber no piensa en meterse un cartuchazo por la boca para volarse los sesos, con heroína hasta las pelotas. Los rockeros odiadores traman este anti-pop porque les parece injusto que ELLOS no están en la cima.
No habrá un himno nacional en heavy metal, nunca habrá un acuerdo para exclusividad de rock en el arte mundial, y a nadie le convence el estilo de vida metalero. Muéranse de hambre.
RICARDO ARJONA:
¿Qué odian?
Lo incomprensible de sus letras
Lo monótono de sus temas e interpretaciones.
La ridiculez de sus filosofías.
La falta de originalidad.
La idolatría de mujeres con las feromonas alborotadas por este hombre.
Es raro, pero cuando apareció Ricardo Arjona en el medio artístico, a todos les parecía genial, y con la introducción y popularidad de las redes sociales se tiraron todos el culo al monte (como dicen en mi país) y ahora resulta que nunca fue bueno ¿Qué rayos? Mi desprecio a Ricardo Arjona es auténtico porque a mi siempre me pareció que despertaba sentimentalismos insufribles en las personas débiles, y yo odio el no reconocimiento de las reacciones químicas como motor de la irracionalidad humana en los sentimientos.
Cuando mi novia entra en periodo de ovulación, solo me provoca meterla en una jaula y darle de comer frutas con sedantes hasta que se le pase.
Muchos dicen odiar a Ricardo Arjona, pero al rato salen replicando a Paulo Coelho o repitiendo frases motivadoras con filosofías de culo, huevadas de tan poca calidad mental como Historia de un Taxi de Arjona.
EL PRESIDENTE
¿Qué odian?
-Lo que hace
-Lo que dice
-Lo que no hace
-Lo que no dice
-Su periodo presidencial
-A toda la ciudadanía que lo apoya
No voy a ahondar en los errores y desaciertos que un Mandatario comete. Tampoco gastaré palabras señalando todo lo mal que hace o permite. Lo que yo veo es que parece una manía de "Odiemos al Presidente". Te voy a hacer una lista de las últimas generaciones de odiadores:
-Los que odiaron a Roldós (estos son chistosos, porque desde que murió, ahora nadie lo odió)
-Los que odiaron a Hurtado
-Los que odiaron a Febres-Codero
-Los que odiaron a Borja
-Los que odiaron a Sixto Durán-Ballén
-Los que odiaron a Bucaram
-Los que odiaron a Alarcón
-Los que odiaron a Mahuad
-Los que odiaron a Lucio
-Los que odiaron a Noboa
-Los que odian a Correa
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| Como se darán cuenta, nadie odió a Rosalía Arteaga porque no hubo tiempo para odiarla. |
No me parece nada raro que los haters de un presidente aparezcan, lo que sí objeto es que sean los que olvidan anteriores gobiernos de ideologías contrarias, (la puta que los parió) que alguna vez también se opusieron. Es decir, aquí no se elige Presidentes, elegimos a quién nos vamos a cargar por los próximos 4 años.
Es realmente triste cuando la gente se olvida de ser ecuatoriana, cumpliendo una obligación autoimpuesta de poner la vida por defender el ideal de un gilipollas al que no vale la pena. Es más triste cuando nadie se da cuenta que solo tenemos lo que nos merecemos, porque, después de todo, fue la amplia mayoría quienes eligieron a esa persona como su nuevo líder. En la Democracia, la minoría es eso: Una minoría.
Odiar a un Presidente hasta porque es emelecista es equivalente a votar por él porque te parece guapo y de ojos verdes. Váyanse a la verga con el País en hombros. Cada cierto tiempo, ya sea por provocaciones del propio presidente o por lo tarado que es la oposición (o una letal combinación de ambos) el País se va al carajo en disputas separatistas.
LOS CHISTES AGRIOS
¿Qué odian?
La naturaleza pésima de los chistes colocados en Internet.
Me desencaja cuando un papanatas escribe públicamente "Dejo de seguir al Encamador porque ya no me hace reír. Dedícate a otra cosa". Qué gente chillona, cretina y sin vergüenza, mentirosa y doble cara.
¿Se han dedicado a leer a esta gente que critica así? Tienen el contenido más aburrido del mundo, ideologías sacadas de una funda de Tostitos, y tienen cara de pene triste. Abdalá Bucaram es una real farsa, es loco por idiota, escribe huevadas en Internet que a nadie le interesa y todos lo siguen porque para ellos es un entretenimiento similar a un payaso. Si este tipo un día (Mahoma no lo permita) se dedicara un día a criticarme, me cagaré de risa cómo lo hago quedar mal.
Por último ¿hay tanto drama por el humor? (por muy irónico que esa pregunta se lea)
Yo no tengo la culpa de que a la gente le de pereza pensar lo intelectual de mi humor, y realmente agradezco a la gente que se aleja por eso, ya que demuestra que el poder de mi contenido es un excelente filtro para separar quienes son mis lectores más sobresalientes y quienes simple y llanamente valen verga.
La teoría del Odio
Con el paso del tiempo, el pueblo se ha vuelto una sopa marica de sensibles, gente que odia por odiar. Hasta para odiar hay que tener cabeza, y cuando subes de nivel, te mereces el título de crítico, analítico, experto.
La clave no es ser odiador en estado puro. Debes ser cuestionador, tener un toque de mente abierta, ser más sabido que el odiador que te enfrenta y pisar su cabeza con clase, intelecto, argumentos. Lo que la gente no entiende es que todos tenemos rabo de paja, porque todos alguna vez fuimos adolescentes que penábamos con el culo en un homenaje a la evolución del primate al homo sapiens, pero bueno, el caso es que muchas de las cosas que las personas odian fueron situadas en el podio social por la misma gente.
Creo que el resentimiento y rencor esconde una rabia mentirosa. Hay veces como esta que quiero decir cosas más allá de ser El Encamador. Y bien podrían decir que me estoy metiendo mi propia cabeza en el culo porque todo lo que he escrito en este artículo se puede ir en mi contra por todo lo que esta página ha sido en su existencia, pero puedo decir que duermo tranquilo por las noches porque lo que escribo es lo que es, no he criticado algo que a escondidas consumo. Si soy abstemio, lo he escrito aquí y lo han visto en persona. La gente que odia allá afuera cada que le hablan un tema que le pelan el sable, hace rato perdió la capacidad cuestionadora que nos vuelve diferentes.
Hay un increíble potencial en el humor. Yo no discrepo en reconocer que odio muchas cosas, muchas las han leído ya, pero las canalizo con el sentido del humor, me burlo del odio, me burlo de la seriedad misma, porque da para eso. La gente hace memes de cosas tan ridículas como el dolor de comer mucho helado o la alerta de mensajes con notificaciones de Facebook, carajo ¿El odio dejó de ser un sentimiento importante? El camino del meme de Internet debe ser criticar cosas más poderosas, debe convertirse en la nueva caricatura de los periódicos, todos podemos.
El humor es la vía, la herramienta. Deja de tirar piedras, no seas huevón, das vergüenza. Búrlate de las cosas que odias, nada lastima más que la risa burlona de las multitudes. Los poderosos esperan que te enfades, que pierdas la cabeza, que te enojes, pero nunca esperan que les hagas payasadas.
Porque en el fondo, todo lo que odia la gente son cosas que la gente mismo puso. La gente se odia lo que es.